Gracias, amor, por tu imbécil comportamiento / me hiciste saber que no era verdad eso de “poesía eres tú” / ¡Poesía soy yo! Gloria Fuertes
Amor romántico: el mito.
Como cada año llega San Valentín y nos taladran con mensajes del “amor ideal”. Como consecuencia se genera negación, frustración, confusión, pérdida de poder y energía.
La causa es el Mito del amor romántico. Primero, se nos muestra que la felicidad máxima es el amor correspondido con una pareja, llamada también media naranja. La otra persona nos colma de atenciones, sorpresas agradables, regalos, placeres y, además, hermosas palabras de amor. Al fin nos sentimos salvadas por el príncipe azul (o sapo en proceso de transformación), de nuestras miserias, sombras y falta de respeto por una misma.
No digo que no exista, aunque no es lo habitual, y esa expectativa suele traer más disgustos que gustos.
Es el engaño perfecto. Ponemos la atención fuera de nosotras mismas, para darnos en exceso o para esperar a recibir. Quedamos despojadas de nuestra soberanía. La partida está perdida la mires como la mires. Aunque, extraordinariamente, se dé esta situación, con esta actitud nos acecharía el miedo a perderlo. Despiertan con furor los arquetipos del patriarcado: la niña herida, la prostituta y la esclava…Pero eso, ya os lo contaré otro día.
Enamorada de ti
En GINEVITEX, este es el nombre con el que lanzamos nuestras campañas en febrero: Enamorada de ti. Y es que, el afecto nace y brota de nuestro interior, de hecho, el de otra persona no lo llegamos a percibir realmente.
El amor hacia nosotras mismas nos colma de gracia que podemos compartir con pareja, hijos, amigas… ¡¡¡Y el mundo entero!!!.
Otro engaño es que la pareja básica es la mujer y el hombre (sin excluir la pareja homosexual). Esto lo establece el patriarcado como contrato de posesión sexual de la mujer cada vez más separada de su linaje y comunidad femenina.
La pareja básica es la madre y su criatura. Es el centro donde se desarrolla una sociedad que hay que cuidar y proteger. Es el amor más visceral y duradero. La crianza en soledad: otro abuso para frenar el desarrollo de los dones de las mujeres. Quedan apartadas a un mundo infantilizado.
Así que… ¿por dónde empezamos?
El plan sería el siguiente: ¿Te imaginas todo tu potencial creativo, romántico, sorprendente, sugerente, sensual, divertido… destinado a ti misma?
Una cita contigo misma en tu cafetería o restaurante preferido. Un baño de espuma con velas y esencias. Escribirte una carta de amor. Irte de viaje a París. Acariciarte con todo el amor del mundo. Brindar con cava mirando las estrellas. Tomarte un helado mirando el mar. Bailar y cantar tu música preferida. Un masaje en un spa. Ver tu peli junto a la chimenea con tus bombones predilectos… ¿Suena bien no? Sé que muchas mujeres lo hacen de forma habitual pero también sé que muchas postergan su bienestar personal por el servicio a los demás o la falta de costumbre.
Recuperar la dignidad empieza por una misma. Es un cambio para equilibrar la balanza, es el cambio como cuando éramos pequeñas y nos salvábamos: “Por mí, y por todas mis compañeras, pero por mí primero”. Después con las amigas, las criaturas, la pareja… llenas de nosotras mismas y nuestro amor.
0 comentarios en “Enamorada de ti (o el mito del amor romántico)”
Me encanta Ginevitex, llevo unos cuantos meses tomándolo y los periodos son más suaves, antes me daban dolor de cabeza y ahora aunque no han desaparecido totalmente son más sutiles y solo un día..
En las relaciones sexuales lo que noto es menos sequedad vaginal y los cambios de humor son menos drasticos, a mi pareja también le gusta jeje
Gracias!
Mónica